YNGWIE MALMSTEEN – MADRID – 2 JULIO 08

Ya han pasado nada más y nada menos que 4 años casi desde que Yngwie visitase la capital madrileña para presentar su potente y hasta ahora último disco de estudio, Unleash The Fury, concierto que ya en su día fué aclamado por la prensa, y desde entonces el mr de las seis cuerdas no ha pisado tierra nacional presentando novedades discográficas. Pues bien...aún sin disco de estudio que presentar, el guitarrista sueco se acercaba esa tarde a La Riviera madrileña para realizar uno de sus magníficos shows, y lo de "magnífico" ya lo sabíamos antes de cruzar la puerta de la sala.

Ahora se avecinaba una incógnita que nos invadiría a todos los asistentes, sin excepción, y es que nadie podíamos imaginar como sonarían los clásicos temas de Malmsteen con la voz del portentoso Ripper Owens, ex vocalista de Judas Priest y Iced Earth...pues con Mark Boals, Michael Vescera o Goran Edman ya fué fácil de imaginar el asunto, pero esta ocasión requería poner los 5 sentidos en el show para degustar por primera vez algo que a primera vista parecía exquisito, y vaya si lo fué, pues el enorme frontman dota de un sonido ultra heavy a todos los clásicos de Yngwie sin perder la melodía y exquisitez que los temas requieren.



Por supuesto la banda que acompañaba al músico tampoco se quedó coja, pues poco sentido hubiese tenido no haber complementado lo anteriormente citado. Patrick Johansson a la batería, Bjorn Englen al bajo y Michael Troy al teclado, completarían la banda que esta noche nos haría vibrar de emoción, y que sonaron de lujo (a pesar de algunos pequeños errores de sonido que hubo a lo largo del show, que no se podría calificar de sobresaliente en cuanto a sonido), especialmente Johansson, quien ya es perro viejo y dota a los temas de Yngwie de una fuerza descomunal, como pudimos observar cuando el guitarrista tenía que cambiar de guitarra y se quedaba la base rítmica dale que dale.




El concierto en si comenzó antes de lo programado, pues en el sencillo escenario (los típicos pilares de Marshall) apareció la banda un cuarto de hora antes de lo que al menos, ponía en las entradas, algo a criticar negativamente, pues todos sabemos los atascos que se sufren en la capital, con lo que más de uno entraría con el concierto ya comenzado.




Rising Force fué la primera en caer, con un sonido un tanto embarullado, pero con un Malmsteen motivado, técnico y realizando de las suyas...poses, saltos, acrobacias...todo parece posible cuando sale de las manos del sueco, y también de la voz de Owens, quien despejó dudas desde el primer momento.

A remarcar el detalle de las curiosas patillas que se ha dejado Yngwie...alguien se fijó? El sonido fué mejorando y con una estabilidad bastante aceptable pudieron continuar el concierto de la mano de Never Die, tema de apertura del disco que mas ha gustado de siempre a quien escribe del guitarrista, es decir, Seventh Sign. Potentísima versión por parte de toda la banda, pues el tema requiere un extra de potencia y garra, algo que se lo supieron dar los músicos de esta noche, más si tenemos en cuenta que el tema original lo grabaron bestias musicales como Terrana o Michael Vescera, con lo que la tarea de igualar el cañón sónico del tema, era complicada.



Tras una vuelta por el año 94, volvieron un poco para atrás para repasar Eclipse, uno de los discos más elegantes de Johann, con Demon Driver la cual sonó de lujo, super heavy, rápida y con un Yngwie que ya había tirado como unas 10 o 15 púas a las primeras filas, y se había pasado la guitarra volteando su cintura en varias ocasiones.





Solo acústico (ojo al dato, pues la técnica empleada por Malmsteen en acústico es de infarto, empleándolo en varias ocasiones en el concierto), y cae por su propio peso Gates Of Babylon de Rainbow como representación de Inspiration, con sus tonos más místicos intactos y con una interpretación magistral de la mano de toda la banda, para dar paso directo a Fugue, interludio que, con sonidos acústicos más adelante nos sorprende con Dreaming (Tell Me). Podrían escoger temas lentos como Hold On, I'll Own My Enemy o Brothers, pero amigos, lo de este tema es magia pura y no se lo podían dejar en el tintero, pues es la balada por excelencia de Yngwie y creo que es a muchos a los que nos pone los pelos como escarpias.


De nuevo escuchamos cover de la mano de Mistreated que en esta ocasión suena de lujo, al igual que Adagio de su Concerto Suite que aún sin la orquesta, suena clásico al 100%.



Llegados a este punto, remarcar la gran conexión por parte de Owens tanto con Yngwie, con el que incluso bromeó, como con el público...un 10 para Ripper, que volvió a dejarnos claro que es uno de los mejores vocalistas de metal.

Trilogy Suite Op.5 hizo las delicias de los seguidores del metal neoclásico al igual que un enorme solo de batería por parte de Patrick, mientras que minutos mas tarde, Yngwie se atrevía con su voz más rota y bluesera. A partir de aquí se desata la traca final del concierto, con rotura de cuerdas por parte de Malmsteen, solos veloces, efectos, guitarra para arriba, para abajo...un espectáculo que solo el sabe dar, y que desembocó en un final de show conformado por la enorme Black Star de su primer álbum, You don't remember, i'll never forget representando Trilogy y poniendo la sala patas arriba, y para terminar una perfecta interpretación de I'll see the light, Tonight, que cerró un círculo de temas para un concierto con altas dosis de magia.



A pesar de los problemas de sonido, el show fué increíble e inolvidable y es que como comentaba alguien que presenciaba el concierto, "quedan muy pocos como el...si en el rock todavía hubiese estrellas como el...". Pues eso, a disfrutar de él mientras podamos, que todavía le queda cuerda para rato.



Yngwie Fucking Malmsteen Rules!

Crónica: José Rojo
Fotos: Ikki Muñoz (Show Bilbao)

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TEXTO: José Rojo
FOTOS: IKKI MUÑOZ (Bilbao)
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