RAMMSTEIN - RAMMSTEIN

Artista: Rammstein
Álbum: Rammstein
Sello: Universal Music

No iba a ser yo quien juzgase un disco, que se ha hecho esperar nada más y nada menos que diez años sin haberlo escuchado profundamente. No iba a ponerme a escribir el mismo día que lo escuché...y de haberlo hecho, la opinión hubiese sido muy diferente de la que tengo una decena de días después de que Rammstein, el nuevo álbum de los alemanes, cayese en mis manos. Me parecía injusto tanto para la banda, como para el lector...y yo mismo. Necesitaba un ejercicio de conciencia, analizar muchos factores y liberar mi cabeza de expectativas, prejuicios, y sobre todo, de la idea de encontrarme otro Liebe ist für Alle Da, probablemente su mejor disco junto a Mutter y su debut, Herzeleid. Partiendo de esa premisa, y teniendo en cuenta que he podido degustar la obra con detenimiento, ahora sí es el momento de hacer un análisis justo, y un balance a la altura de lo que el álbum merece.

Creo que para los seguidores de la banda, una cerilla significa mucho, así como la sobriedad de todo el artwork del digipack, lo cual nos anuncia que estamos, claramente, ante un compendio de intenciones marcadas a priori, sin dejar nada al libre albedrío. Kruspe, Till y su empresa, quieren que hagamos caso a lo que hay justo debajo del fósforo al levantar la tapa, como también sienten la necesidad de que sepamos, justo antes empezar la escucha, que estamos ante un trabajo de Rammstein al cien por cien. Con sus pros, sus contras y lo más importante...su esencia intacta. Como si no hubiese pasado una década desde que nos sorprendiesen con una de sus grandes obras, cuyo único cambio viene de la mano de la producción, de la que se ha encargado Olsen Involtini (guitarrista de Emigrate), junto a los propios Rammstein y Richard Kruspe, variando la pegada de sonido poco o nada respecto a anteriores entregas, y es que, ¿quién mejor que el propio Richard para saber lo que necesitan sus compañeros y sus canciones?.

El álbum empieza descomunal, con la que para quién escribe, ya es una de las mejores canciones de la historia de los germanos. "Deutchsland" es ascendente, su punteo adictivo, y su subida apoteósica, hasta llegar a un tema no tan machacón como por ejemplo, "Rammlied", pero de una épica, estribillo, pegada y coros de otro planeta. Esas reminiscencias de fondo con los casi susurros de Kruspe ofrecen mucho más de lo que parece, y todo suena en su lugar. Amigos...un single así, diez años después, es todo un motivo de celebración para cualquiera que haya seguido de cerca los pasos del gigante industrial. Incluso la sensacional "Mein Land", siendo la única grabación en estudio de los últimos años, mira para arriba desde su posición, al pepino que abre el disco homónimo, y diría que se sonroja ante la grandeza de este. La producción es nítida, Flake no deja de sorprender, y para Till no han pasado los años...al menos, vocalmente hablando. Así que, respirad y tomad aire, que no hay sorpresas de mal gusto. Pero es dar comienzo "Radio", y esa sensación de agobio, de no saber si esto estará a la altura, se disipa por completo. El tema es Rammstein on fire, con un riff marca de la casa, un Lindemann especialmente expresivo, y un Flake que ha ganado en protagonismo respecto al álbum antecesor. Las influencias de Kraftwerk en las partes más electrónicas, son más que evidentes, mientras que la la potencia de la canción se apodera de tu memoria a cada escucha, para crear un single en toda regla...un futuro clásico de la banda.

Acomodados y con el oído acostumbrado a la nueva baza alemana, llega otro trallazo imbatible. "Zeig Dich" es toda una mezcolanza entre la monumental "Waidmanns Heil" de su anterior obra, y cualquier trallazo de su debut "Herzeleid", que, con un comienzo épico y un riff monumental, marca de la casa, nos brindan un estribillo para que Lindemann se coloque su rodilla a golpes en la gira (y los más fans, saben de lo que hablo). Pasado el éxtasis inicial, empieza esa heterogeneidad de la que gozan algunos trabajos de su discografía, como Reise, Reise, en esta ocasión con el tercer single del lp. "Aüslander" me chirrió tanto en primeras escuchas, que de inmediato supe que escondía algo que mi oído no era capaz de asimilar con rapidez...y así fue. Ahora, decenas de escuchas después, puedo decir que es un correcto sencillo, radiable, de formas desenfadadas y muy, pero que muy estudiado al milímetro para que esa frase pre-estribillo se te quede grabada a fuego en la memoria. Una vacilada al más puro estilo "Amerika" o "Pussy", pero en mi opinión, con más acierto y gancho que estas dos. "Sex" sin embargo, es de esas canciones previsibles pero necesarias en un disco de Rammstein, de gruesas guitarras, buen trabajo de ambiente de Flake, pero de gran pegada por parte de un Christoph que sabe que menos, es más, dejándonos llegar a un ecuador, casi emocionados de tenerlos de vuelta en tan buena forma.

A partir de este punto, la polémica está servida, pues "Puppe", a pesar de ser instrumentalmente impecable, peca de una sobreactuación por parte de Till, que puede gustar, o no, recordándome personalmente a Lacrimosa en algunas partes de la interpretación y salvando distancias. Digo claramente que es el corte que menos me ha enganchado de Rammstein, lo que no es una verdad absoluta, sino la sensación de alguien que conoce muy bien el sonido de los de Kruspe, lo que le gusta si viene de ellos, y lo que no. Aunque afortunadamente, "Was Ich Liebe", a pesar de bajar de revoluciones y de poder haber sido un tema de Emigrate, tiene ese "algo" que tenían otros temas como "Los" (de Reise, Reise). Probablemente sea el estribillo, su parte más acústica, o los acolches de Flake, pero la canción te termina atrapando, mientras que "Diamant" sirve como interludio al más puro estilo "Ohne Dich", dejando sacar la cabeza al Lindemann más lírico, para entrar de lleno en una auténtica joya escondida como es "Weit Weg", donde el teclado de Lorenz al más puro estilo Rainbow (que sí, que sí...), nos adentra en una composición que podría haber sido una de las apuestas más tranquilas de Mutter. Sensacional medio tiempo que crece por segundos.

"Tattoo" nos devuelve a los Rammstein más enérgicos, machacones e industriales, sugiriendo pirotecnia, un Till enloquecido y chispas por doquier, mientras que "Halloman" no deja de ser un medio tiempo que podemos considerar como outro sin más, sin dejarnos escandalizados, pero para nada insatisfechos.

El grave error que comete cualquier melómano o seguidor acérrimo de cualquier banda, es aferrarse a una expectativa, y no hay nada peor que crear una idea con raíz en el pasado, tras una década de inactividad discográfica (en estudio). Rammstein es un gran disco, notable, y con la identidad de la banda tan intacta que parece que no pasen los años para ellos...ni para sus ideas de cómo deben o quieren sonar. Algo que muy pocos consiguen. Y es que si te gustó la trayectoria anterior de la formación más creciente de los últimos veinte años, seguro que disfrutarás de lo lindo de este self-titled album. Pero hazte un favor a ti mismo, y no trates de comparar...¡disfruta!. ¿Quién sabe si será la última llamarada?.

José Rojo

Agregado: June 4th 2019
Moderador: joserojo
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